martes, 8 de julio de 2008

Por el momento voy a dejar este poema que hace unos días escribí, después de una noche mágica, proximamante escribiré algo más...


"UNA NOCHE CUALQUIERA"

No hagas caso a los ecos que no te nombran

Solo escucha amor las palabras que salen de mis besos

Y el grito de mis manos cuando te acarician

Diciendo tu nombre a los cuatro vientos

A los cinco océanos y los dos continentes que habitamos

Siente mi aliento y que tu respiración se agite

Y con voz cortada digas mi nombre entre quejidos

Que tu piel me ilumine con su magnificencia celestial

Quiero recorrer tu pecho con paciencia

Perderme en tu cabello lentamente

Mientras la oscuridad se ilumina para recibirnos

Tu nombre lo perdí hace mucho ya

Pero tu cuerpo está marcado en mí

Perdámonos en esta noche que parece recién comenzar

Con las estrellas como testigos

Digamos que esta fue otra noche cualquiera

Tus ojos en silencio me dicen que no termine


2 comentarios:

Anónimo dijo...

mmm... sugerente... y sobre todo si fue después de una noche mágica...

hay que fascinación perderse en un cuerpo amado y recorrer tan solo con besos esa piel deseada...

que felicidad la de besar labios y cuellos y todo lo que sigue..

uy!! ya no escribo más, mira que se pone hot la cosa... xD

que bueno llerte así, mas contento al parecer...

te deseo miles de noches mágicas más... no hay nada mejor que eso

saludos desde lejos, empezando un nuevo semestre (nooooooo! levantrame temprano otra vezzzzz!!)


chau chau

Anónimo dijo...

* era leerte... no llerte